Insulso Trovatore el que vivimos el viernes. Propuesta escénica lamentable que casi parecía una versión de concierto con alguna intención de actuar por los protagonistas. Minimalismo vacuo.
De los protagonistas conquistó la soprano china Hui He que mereció más aplausos del público que quizás premió más el efectismo y tablas de la Fiorillo.
Soso y limitado el Manrico de Fraccaro que no convenció ni en las partes más líricas, falto de encanto, ni en las heróicas, falto de intención. Flojísimo el Conte di Luna de Jenis al que la partitura exige mucho para lo que puede dar.
Flojos también los restantes miembros del reparto, aunque Palatchi salió airoso. El Coro bien.
Flojísima la dirección musical. Si en otras óperas se nos traen a especialistas, no se comprende la contratación de un director normalito como J.Reynolds. Así su lectura se limitó a salir del paso. Matices pocos, problemas en las entradas, volumen excesivo y aproximación banal.
No es que se pueda esperar mucho hoy de un Trovatore, pero si sólo dos cantantes cumplen, sin excesos; la dirección musical es rutinaria y la escénica deja el peso a la parte musical poco se puede conseguir.
La prensa local recoge las impresiones, diversas, profesionales.
LNE pensarán ustedes que la función de estreno fue un fiasco. Pues de eso, nada. Todo lo contrario, un éxito en condiciones, cuyo valor se acrecienta tratándose de un título emblemático del repertorio carbayón ante el que el respetable siempre está de uñas.
Las ovaciones fueron intensas para todos
EnLa Voz La versión musical fue lamentable...
La puesta en escena también resultó decepcionante...
Del reparto sólo destacó el Coro de la Ópera, que realizó un gran trabajo que sobresalió.
El Comercio La representación de la popular ópera con dirección escénica de Gilbert Deflo entusiasmó al público del Campoamo
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